John Stott nos invita a reflexionar sobre la madurez cristiana a través de nuestra relación con Jesucristo, como se refleja el versículo de Colosenses 1:28. En este pasaje, se destaca la importancia de crecer espiritualmente y desarrollar una conexión profunda con nuestro Salvador. A través de las enseñanzas de John Stott, somos guiados hacia un mayor entendimiento de cómo fortalecer nuestra fe y alcanzar una madurez espiritual plena.