Llama la atención que la mayoría de los famosos, cuando les preguntan si se arrepienten de algo en la vida, siempre dicen que no se arrepienten de nada, como si fuera algo de lo que se sienten orgullosos. Esa soberbia es la que la Biblia llama justicia propia, la confianza en uno mismo que arruina nuestra vida y religión, cuya idea del arrepentimiento es también una forma de justicia propia. El cambio de mente, vida y actitud al que llama Juan al comienzo de la Buena Noticia según Marcos no es sólo lamentar las consecuencias de lo que uno ha hecho.
Las palabras del profeta Isaías que comienzan el Evangelio, inspiraron la canción que inicia el musical de «Godspell» (1971), «Preparad el camino al Señor». Escrita por el compositor judío Stephen Schwartz y John-Michael Tebelak, que le sirvió de tesis para la universidad cuando estudiaba la mitología clásica y los evangelios, fue llevada al teatro alternativo y ahora vuelve a los escenarios españoles de la mano de Antonio Banderas. El arrepentimiento al que llama Juan es de ese mal que los Ramones neoyorquinos describieron como un veneno que domina tu corazón, Escuchamos la valiosa versión de «Poison Heart», que hizo el año pasado, el sevillano que atiende al nombre de Freddie Dilevi. Quien mejor ha descrito siempre la anatomía del pecado desde el punto de visto bíblico ha sido T-Bone Burnett, el guitarrista de Dylan, cantautor y productor, además de autor de tantas bandas sonoras. Le escuchamos junto al guitarrista de la banda de folk-rock, Fairport Convention, Richard Thompson, criado como presbiteriano y convertido al Islam en su juventud, que hizo en los años 70 con su esposa Linda, grandes canciones.
La pensadora judía Hannah Arendt huye de la Alemania nazi a Nueva York, donde se ofrece a la prestigiosa revista New Yorker para cubrir el juicio en Jerusalén del responsable del transporte a los campos de exterminio, Eichmann, capturado por la Mossad en Buenos Aires. Sus sorprendentes conclusiones sobre «la banalidad del mal» han pasado a la Historia. La gran directora alemana Margarethe Von Trotta retrata la perplejidad de esta filosofa ante la trivialidad del mal en la película que lleva su nombre, «Hannah Arendt» (2012). Escuchamos algunos interesantes diálogos del film con la música de la banda judía polaca Kroke y los comentarios de José de Segovia.
La canción «Tentación» fue escrita por el atormentado Tom Waits en 1987, que escuchamos en la voz de la canadiense Diana Krall. Uno de los temas más populares de los 80 nos dice qué «Es un pecado». Escrita por el dúo de «tecno-pop», Pet Shop Boys, refleja la educación católica de Neil Tennant en tono irónico, pero él dice que al escuchar un sermón de un párroco de Newcastle, «dejó de anunciar un horrible infierno, para traer un mensaje de amor». Más seria era la intención desde el principio de la canción de los británicos Spacemen 3, el grupo del alma de Spiritualized, Jason Pierce, que se llama «Caminando con Jesús» (1987). Su búsqueda de perdón va unida al deseo de encontrar a Jesús, como el verdadero arrepentimiento es inseparable de la fe. Son dos caras de una misma realidad.
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