Estos días de vacaciones, no es difícil acordarse de los tiempos en que los años se contaban por los veranos. Si nuestra infancia es nuestra única patria -como decía el autor de El Príncipito-, parece que cuando uno se hace mayor, se sorprende cada vez más enfermo de nostalgia. Es por eso que llevo adquiriendo desde hace unos meses, una edición que ha hecho Salvat para coleccionistas, de los números extra del antiguo TBO -la revista que dio nombre a los cómics en España desde principios del siglo pasado-, que leen ahora mis hijos.
TBO: Cuando los cómics se llamaban tebeos- José de Segovia
por
Etiquetas:
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.