Lencho Patas Planas, el entrañable personaje creado por David Pinto, es un narrador de cuentos que conserva la esencia y generosidad de los tiempos antiguos en Guatemala. Aunque ahora reside en Occidente, mantiene viva la cultura oriental de su tierra natal. A través de Lencho, se relata la anécdota de un velorio en Ipala, donde un enano del circo fue llorado por todos, a pesar de que muchos desconocían su nombre. En este relato, el autor, Harris Whitbeck, destaca la ironía de cómo un ser desconocido puede conmover a toda una comunidad. La narrativa lleva a reflexionar sobre la compasión divina, señalando que Dios conoce hasta el más mínimo detalle de su creación y se compadece más profundamente de ella de lo que la misma humanidad lo hace. La historia concluye con la invitación a cultivar una relación cercana con Cristo que cause asombro, similar al impacto del enano del circo en Ipala.
«Muchos nunca supieron su nombre» – Un mensaje a la conciencia
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